Eficacia de la acupuntura en el tratamiento de los síntomas asociados a la hiperplasia benigna de próstata

La hiperplasia benigna de próstata se caracteriza por un crecimiento no canceroso del tamaño de la próstata, que puede comprimir progresivamente la uretra y producir dificultad para orinar.

El incremento del tamaño de la glándula, puede originar una obstrucción al flujo urinario y por otra parte, la alteración del tono muscular del cuello de la vejiga y del músculo liso de la próstata, puede provocar irritación.

La prevalencia de la hiperplasia benigna de próstata aumenta con la edad, y afecta fundamentalmente a varones mayores de 50 años (es muy raro que se manifieste antes de los 40 años).

A los 40 años, un 14% de los varones presentan síntomas que hacen sospechar su presencia.

Entre 50-60 años este porcentaje aumenta hasta el 40-50%, y hasta el 80% de los mayores de 80 años pueden verse afectados por la hiperplasia benigna de próstata.

Los síntomas de la hiperplasia benigna de próstata se pueden distribuir en dos grupos: 

Síntomas obstructivos o de vaciado:
Chorro de orina fino, dificultad para iniciar la micción, chorro intermitente, vaciado incompleto de la vejiga, goteo tras finalizar la micción.

Síntomas irritativos o de llenado:

Dolor abdominal, incontinencia, aumento del número de micciones durante el día, aumento de la frecuencia en la micción nocturna, que incluso es más frecuente ir al baño de noche que de día, y urgencia miccional.

La obstrucción producida por la hiperplasia benigna de próstata puede provocar complicaciones, vaciado incompleto de la vejiga, insuficiencia renal, infecciones urinarias frecuentes o formación de piedras en la vejiga.

Generalmente, en la mayoría de los pacientes la progresión de los síntomas es lenta, y las complicaciones graves no son habituales.

El tratamiento en la hiperplasia benigna de próstata depende de la intensidad de los síntomas que presenta el paciente, de cómo afecta a su calidad de vida, del riesgo de retenciones agudas de orina y de la presencia de complicaciones.

El tratamiento farmacológico de la hiperplasia benigna prostática más habitual consiste en:

• Bloqueantes alfa-adrenérgicos que mejoran los síntomas y el flujo urinario, pero no disminuyen el volumen de la próstata.

  Cuando se administran estos fármacos debe vigilarse la tensión arterial, ya que pueden ocasionar bajadas de tensión.

• Inhibidores de la 5-alfa-reductasa que disminuyen el tamaño de la próstata, y están indicados en los casos de hipertrofia importante.

En los pacientes sin respuesta al tratamiento farmacológico, o con complicaciones como piedras en la vejiga, presencia de sangre en la orina, y retención urinaria, entre otras, se suele recurrir al tratamiento quirúrgico.

La severa afectación de la calidad de vida de los pacientes afectados, el riesgo de complicaciones, junto a los efectos secundarios de los tratamientos farmacológicos más frecuentemente prescritos tales como hipotensión, mareos, disminución de la libido, o disfunción eréctil entre otros, hace que cada vez con mayor frecuencia, los pacientes afectados recurran a la acupuntura para reducir los síntomas urinarios asociados a la HBP, que ha demostrado en numerosas ocasiones su eficacia de manera segura y en ausencia de efectos secundarios.

El artículo que en esta ocasión revisamos, publicado en Acupuncture and Herbal Medicine, está basado en los resultados de un metaanálisis de ensayos clínicos con el objetivo de evaluar la eficacia y seguridad de diferentes tipos de acupuntura y moxibustión para el tratamiento de los síntomas del tracto urinario inferior asociados a la HBP.