Según la Medicina Tradicional China, disfrutar de mucha energía es una muestra de buena salud y nuestra energía proviene esencialmente de los alimentos que comemos.

Mientras que Occidente se pregunta «¿trabajar para vivir o vivir para trabajar?», los chinos dicen algo similar pero con distinto sentido, “comer para vivir y vivir para comer “ . El hecho de comer ya no supone solo llenarse el estómago sino un acto social de máxima importancia.

En la Medicina China Tradicional, decimos que lo que nos nutre no son los alimentos en sí sino sus sabores. Para la gastronomía china se logra un equilibrio mezclando alimentos de diferentes colores y condimentos de diferentes sabores. Ahí van unos consejos prácticos que nos ayudarán a mejorar nuestra alimentación y consecuentemente a equilibrar nuestra salud:

-Evitar los preparados precocinados. Los alimentos tienen que ser de temporada, frescos y preparados de la manera lo menos procesada posible

-Alimentación basada principalmente en alimentos producto de la tierra: vegetales, cereales, verduras, legumbres, frutas, semillas y procedentes del mar: algas, pescado, crustáceos. Y en menor medida, carnes blancas.

-Tómese su tiempo, y siéntese a comer sin distracciones.

-Primero tomar un poco de sopa caliente para abrir el apetito antes de ingerir los alimentos sólidos.

-Mastique bien la comida y evite tomar bebidas heladas o excesivamente frías durante la comida

-Coma más frecuentemente y más ligero (5 comidas al día)

-Procure cenar ligero y deje como mínimo 2 horas antes de acostarse.

Y no olvide que alimentos tan deliciosos como la piña, el pomelo, el jengibre, la canela o la pimienta nos ayudarán a tener mejores digestiones. ¡Bon Apetit!